UNDER THE SUN
Narowé
17.12.22 – 14.01.23
17.12.22 – 14.01.23
Las noches del desierto pueden ser frías, pero aquélla había sido un fuego. Soñé que un río de Tesalia (a cuyas aguas yo había restituido un pez de oro) venía a rescatarme; sobre la roja arena y la negra piedra yo lo oía acercarse; la frescura del aire y el rumor atareado de la lluvia me despertaron. Corrí desnudo a recibirla. Declinaba la noche; bajo las nubes amarillas la tribu, no menos dichosa que yo, se ofrecía a los vividos aguaceros en una especie de éxtasis. Parecían coribantes a quienes posee la divinidad. Argos, puestos los ojos en la esfera, gemía; raudales le rodaban por la cara; no sólo de agua, sino (después lo supe) de lágrimas. “Argos, le grité, Argos”.
Entonces, con mansa admiración, como si descubriera una cosa perdida y olvidada hace mucho tiempo, Argos balbuceó estas palabras: “Argos, perro de Ulises”. Y después, también sin mirarme: “Este perro tirado en el estiércol”.
Fácilmente aceptamos la realidad, acaso porque intuimos que nada es real. Le pregunté qué sabía de la Odisea. La práctica del griego le era penosa; tuve que repetir la pregunta.
Muy poco, dijo. Menos que el rapsoda más pobre. Ya habrán pasado mil cien años desde que la inventé.
El Inmortal, Jorge Luis Borges
Partiendo del cuento de Borges, Narowé realiza una serie de pinturas que recuerda a uno de los momentos de la historia donde el protagonista de esta, después del beber agua del río que otorga la inmortalidad, tiene que adentrarse en la ciudad de los inmortales, habitada por trogloditas que pasan sus días arrastrándose bajo el sol del desierto.
Esta serie ha sido titulada “Argos, perro de Ulises” Compuesta por cuatro obras de gran formato que retratan a habitantes de la ciudad de los inmortales ( los trogloditas) en el paisaje. Además el artista crea una serie de dibujos de construcciones sin sentido que ponen límite – si se puede – a una ciudad que siempre estará viva.
Seres fantásticos, deformes y aparentemente desorientados habitan los cuadros del artista brasileño, creando un ambiente desordenado y engurruñado que desconcierta a la vez que atrae. Si el espectador no rechaza la idea y es capaz de mirar con atención, cada elemento en la composición nos desvela un poco más de la historia. Caminos que nos llevan a algún sitio, estrellas que se mezclan con otros garabatos, varios soles en un mismo cielo. Todos estos, se mezclan entre sí para ilustrar, no solo el cuento de Borges, sino para conocer un poco mejor lo que piensa e imagina el artista.
Donde empieza el retrato y donde acaba la imaginación.
– Partiendo de una investigación de lo pictórico, del color y de la forma, busco trabajar la desfiguración del dibujo, yendo a veces hacia lo abstracto, a través de la idea de serie y narrativa visual, para crear un paseo entre los trabajos.
Con esta idea del paisaje bajo el sol, desarrollé otras pinturas y dibujos, experimentando con dibujos yuxtapuestos, dibujo rápido, acrílico y óleo sobre lino crudo, y esmalte sobre papel. –
Under the sun
Juan Narowé